Desde tiempos ancestrales, las especias son grandes aliadas en la cocina de todo el mundo.
En nuestra cultura, nos encanta cocinar con especias suaves, que dan un toque especial a nuestros platillos.
Son un excelente sustituto de la sal o el azúcar, según su tipo de elaboración.
Tienen grandes propiedades, como por ejemplo, actúan como agentes antimicrobianos, tienen efectos calmantes para dolencias leves, hacen tus platos más digestivos y aportan un gran poder antioxidante.
Según el tipo de platillos que vamos a preparar, podemos dividirlas en dos grandes grupos:
Para elaboraciones dulces, podemos usar la canela, vainilla, cardamomo, clavo, nuez moscada, pimienta rosa, jengibre y anís.
Suelen utilizarse para darle más sabor a los bizcochos, tartas, cremas o galletas.
Para elaboraciones saladas tenemos especias como el orégano, azafrán, romero, tomillo, comino, cúrcuma, clavo, pimienta, nuez moscada, curry, pimentón, ají o chile.
Estas últimas, se utilizan principalmente en elaboraciones de pastas, carnes, pescados, salsas, cremas o aderezos.
Normalmente las encontramos molidas en el supermercado, por lo que es importante conservarlas lejos de la luz y la humedad.
En la cocina española, solemos cocinar con sofritos, que a los intolerantes a la fructosa nos sientan mal, por lo que os recomendamos probar con las especias, que además de sus beneficios, aportan un sabor exquisito a nuestras comidas.
Atrévete a probarlas y verás como tus comidas dejan de ser platos sosos y aburridos.
Muy buena publicación pero faltó decir los que contienen fructosanos solubles en agua como el ajo para poder elegir algo bueno pero bien tolerado en la Dieta para Intolerancia a la Fructosa
Buenos dias Elena. No he entendido muy bien lo que quieres decir. Tengo intolerancia a la fructosa y sorbitol y estoy en proceso de averiguar todo. Toda recomendación bienvenida. Me puede explicar esto lo del ajo?